Día 2: seguimos conociendo Nápoles.

El Barrio Español y gran parte de Nápoles esconde un secreto: un mundo de túneles y laberintos bajo sus bulliciosas calles así que  exploramos con un guía una parte de este entramado  subterráneo con sus tanques, cavidades y cisternas que suministraron agua a la ciudad durante siglos para terminar como refugio durante la Segunda Guerra Mundial y salvar la vida 200.ooo personas asediadas por los bombardeos. Después visitamos el Castillo de Sant´Elmo y sus maravillosas vistas de toda la ciudad y del Vesubio, el convento de la Certosa con su magnífica colección de belenes y su claustro, la Catedral y la estación de metro de Toledo (obra del artista y arquitecto español Óscar Tusquets). Nápoles tiene tanto que ver que dos días son poco.